Al recibir el ataque, anulándolo con mi hechizo, retrocedí por la fuerza. Vi que se me acercaba muy rápida y volvía a atacarme, medio bloqueada solo se me ocurrió saltar para apartarme de la trayectoria del depulso. Caí al suelo y di una voltereta y ataqué yo. -Depulso
Al escuchar ese hechizo me quedé parada, no lo había oido, de modo que me dio. Noté como se me pegaban las piernas. Intenté despegarlas, pero era peor que el super glú. -Vaya... Fruncí el ceño.
- Sonia, debes aprender a esconder tus expresiones -le comenté mientras le sacaba el hechizo-. Si no conoces lo que te lanzan, tu igual apártate y protégete, pero nunca demuestres tu ignorancia. Es un punto en tu contra y a favor de tus enemigos.
-No deberías confiarte demasiado ^^ La dije cuando estuvo en el suelo, luego lanzó un hechizo totalmente desconocido, esta vez no iba a picar. Cogí la varita y la puse en la boca y me tiré al suelo a cuatro patas. Caminé tres pasos y arrodillada en el suelo le lancé el mismo hechizo. (por probar, pensé) -Relaskio
No me dio tiempo a levantarme así que opté por dar una vuelta por el suelo para apartarme de ella, aunque su hechizo me dio en el pie. Hizo que me arrastrara por el suelo unos metros.
Veloz me puse en pie y apreté la varita, sabía un contra hechizo y si lograba potenciarlo no solo sofocaría el suyo, sino que la alcanzaria. -¡¡Glacius!!
Me sorprendí de su rapidez, pero no bajé la varita mientras me levanté de un salto- Al final, cuando vi que iba a ganar a mi hechizo, lo rompí para correr lejos del que iba a darme.
Estaba bloqueada y miré con rapidez a mi alrededor y vi a los peluches, tuve una idea. -Wingardium leviosa Uno de los peluches voló y lo puse entre el hechizo y el mio. Cada vez estaba más emocionada, los hechizos no me fallaban, aunque tambien procuraba utilizar los que me sabía, pero ver que incluso alguno nuevo funcionaba comenzaba a motivarme.
Vi otro peluche que venía hacia mi, me quedé con los ojos en punto y el peluche chocó en mi cabeza. Retrocedí dos pasos y sacudí la cabeza. -Rictusempra
Me dio de lleno y ocurrió lo que más odiaba en el mundo. Me eché a reír a lágrima viva. Intenté con todas mis fuerzas deshacer el hechizo, pero a causa de la risa no lo lograba pronunciar correctamente. Cuando se me pasó el efecto me quedé medio agachada, apoyando las manos en mis rodillas y con el resto de una sonrisa en la cara. Lentamente elevé la cara para mirarla y negué con la cabeza, dando a entender que ahí había jugado sucio.
- Genial Sonia -la felicité cuando logré recuperar el habla-. Sigue así y en dos días tendrás un nivel elevado en los duelos. De resistencia y reflejos, perfecta... solo te hace falta práctica y aprender nuevos hechizos.
Me puse roja de felicidad, ¿no era mala?, ¿podría en serio llegar tan lejos? Asentí. -Ya verás como me vuelvo más fuerte, y este verano intentaré aprenderlo todo, voy a entrenarme como nunca para que el siguiente duelo no puedas hacer nada y que todos mis hechizos acierten
-Dijo que era hábil en solucionar los problmas con rapidez y valentía Hice memoria. -Creo recordar que me dijo que en Slytherin haría buenos amigos, porque tenía mucha facilidad en relacionarme, pero me aconsejó que estaría mejor en Griffindor Miré a Elena preocupada. -¿Crees qué se equivocó conmigo?
- No, el sombrero jamás se equivoca... -murmuré aun pensando- Te vendrá bien estar en Gryffindor, si te relacionas con los de tu casa y haces amigos ahí... o al menos si te llevas bien con ellos -la miré detenidamente-. Aunque si te dijo que harías buenos amigos en Slytherin es que no puedes confiar mucho en la amistad de los leones... Anda con cuidado, cuando estés con ellos yo no puedo hacer nada por ti... en cambio puedo dar la cara por ti en Slytherin.
-Creo que tabién hago buenos amigos en Griffindor, como Sascha, Irene..., Ja..., bueno..., con él solo he cruzado dos palabras, es muy soso Fruncí el ceño en pensar en él.